DIARIO LA VERDAD: Bola de set.
El Lucentum recibe a La Palma preocupado por su defensa y con la opción de certificar un 6-0 de inicio.
PEDRO ROJAS / ALICANTE
Mantener la tensión defensiva no es fácil, pero sí primordial para lograr el objetivo. El calendario le brinda al Lucentum la posibilidad de certificar un 6-0 de inicio antes de medirse con Rosalía, Cáceres y Melilla. La Palma, fiel a su devenir por la LEB la temporada pasada, en la que terminó descendiendo, no ha ganado aún ningún partido a domicilio. Hoy no debiera ser el primero.
El conjunto insular permanece en la LEB gracias a la desaparición de Alerta Cantabria, Palma Aqua Mágica y Ciudad de Huelva. La inversión en la nueva plantilla no ha sido alta y fundamenta su permanencia en el acierto de Sebas Arrocha, la progresión del marfileño Francis Koffi y la contundencia de Martin Kohlmaier, que con sus 2,17 es la referencia interior del plantel de Domingo Rodríguez.
De lo que puedan dar de sí Perico Sala, en la dirección, y los dos extracomunitarios, Matt Shaw y Thomas Terrell, en el perímetro, dependerán las opciones de victoria de La Palma en el Centro de Tecnificación (hoy, 12.30 horas).
Carles Canal, Marcos Suka y Pavel Ermolinski, que desde que salió de Málaga no ofrece las prestaciones esperadas, completan la terna de secundarios que, como el resto de sus compañeros, pierden confianza lejos de casa.
Los insulares no tuvieron opciones de triunfo ni en Lleida (97-77) ni en Vic (92-63). En ambas canchas aguantaron sólo hasta el tercer cuarto antes de claudicar. Como locales han sumado tres victorias.
El Lucentum, para seguir invicto, deberá mejorar sus prestaciones defensivas y conservar el ritmo anotador de las últimas jornadas. La superioridad alicantina es notable en todas las líneas. La dupla Berni-Llompart ha de hacer valer su experiencia y su mayor envergadura ante dos directores que no superan el 1,75 de altura.
Por dentro, uno de los puntos más débiles de La Palma, hay que saber sacar partido del rebote y de las acciones de bloqueo directo para generar superioridades y, en la medida de lo posible, canastas fáciles en posiciones cercanas al aro, algo que se bordó frente al Breogán en el último partido en el CT. Quintana tiene el reto de conseguir que sus jugadores respeten al adversario, que llega a Alicante sin presión, algo que suele incidir positivamente en el acierto en el tiro.
PEDRO ROJAS / ALICANTE
Mantener la tensión defensiva no es fácil, pero sí primordial para lograr el objetivo. El calendario le brinda al Lucentum la posibilidad de certificar un 6-0 de inicio antes de medirse con Rosalía, Cáceres y Melilla. La Palma, fiel a su devenir por la LEB la temporada pasada, en la que terminó descendiendo, no ha ganado aún ningún partido a domicilio. Hoy no debiera ser el primero.
El conjunto insular permanece en la LEB gracias a la desaparición de Alerta Cantabria, Palma Aqua Mágica y Ciudad de Huelva. La inversión en la nueva plantilla no ha sido alta y fundamenta su permanencia en el acierto de Sebas Arrocha, la progresión del marfileño Francis Koffi y la contundencia de Martin Kohlmaier, que con sus 2,17 es la referencia interior del plantel de Domingo Rodríguez.
De lo que puedan dar de sí Perico Sala, en la dirección, y los dos extracomunitarios, Matt Shaw y Thomas Terrell, en el perímetro, dependerán las opciones de victoria de La Palma en el Centro de Tecnificación (hoy, 12.30 horas).
Carles Canal, Marcos Suka y Pavel Ermolinski, que desde que salió de Málaga no ofrece las prestaciones esperadas, completan la terna de secundarios que, como el resto de sus compañeros, pierden confianza lejos de casa.
Los insulares no tuvieron opciones de triunfo ni en Lleida (97-77) ni en Vic (92-63). En ambas canchas aguantaron sólo hasta el tercer cuarto antes de claudicar. Como locales han sumado tres victorias.
El Lucentum, para seguir invicto, deberá mejorar sus prestaciones defensivas y conservar el ritmo anotador de las últimas jornadas. La superioridad alicantina es notable en todas las líneas. La dupla Berni-Llompart ha de hacer valer su experiencia y su mayor envergadura ante dos directores que no superan el 1,75 de altura.
Por dentro, uno de los puntos más débiles de La Palma, hay que saber sacar partido del rebote y de las acciones de bloqueo directo para generar superioridades y, en la medida de lo posible, canastas fáciles en posiciones cercanas al aro, algo que se bordó frente al Breogán en el último partido en el CT. Quintana tiene el reto de conseguir que sus jugadores respeten al adversario, que llega a Alicante sin presión, algo que suele incidir positivamente en el acierto en el tiro.
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