EL DIA: 101 puntos para perder.
Fue un encuentro espectacular en ataque, con dos equipos repletos de jugadores muy ofensivos y que decidió al final el mayor acierto del Hospitalet. UB La Palma no tiene "4" que trabaje en aro propio y la pelea exclusiva de Alfonso Albert bajo canasta fue insuficiente.
101-106
UB LA PALMA - HOSPITALET
Albert (16) - Jhonson (8)
Taylor (23) - Puyada (12)
Barcenas (9) - Arco (13)
Arrocha (17) - Tornas (9)
Sestokas (8) - Lambropuolus (15)
Mena (5) - Stewart (8)
Wachsmann (1) - Boccia (10)
Liñan (5) - Forcada (-)
Edwards (17) - Terrell (27)
Marolt (2)
Torres (2)
Árbitros: Raúl Sánchez y Rodríguez de Rada. No puede haber dos árbitros peores en toda la LEB. Seguro. Exluyeron por cinco faltas a Sestokas.
Parciales: 14-9, 24-24, 36-34, 54-43, -descanso-, 64-52, 71-70, 80-81 y 101-106.
Incidencias: Encuentro disputado en el pabellón insular de Miraflores ante la presencia de unos 1.000 espectadores.
V. MARTÍN, La Palma
La Palma metió 101 puntos y perdió. Y es verdad. Prometido. Es como tener un Audi A8 y vivir de alquiler en un apartamento sin agua. Sí, claro, vaya espectáculo, es cierto, pero ganó Hospitalet. Dámelos peores, partidos más rancios, que gane el "UB" y luego presumimos.
El encuentro comenzó con canastas. Aquí, allí, arriba y abajo. De donde quiera y pueda imaginar. Piense un sitio. ¿Ya lo tiene?, pues de ese lugar también. Era un ida y vuelta, correr, tirar y no defender. En los nuestros metían Taylor, Barcenas y el "pobre" de Albert cuando "barría" lo que sobraba. Enfrente, Lampropoulos se adueñó del poste bajo en los dos primeros cuartos, aquellos mismos que Terrell (jugó cojo) aprovechó para meter hasta de tres. ¿Y la defensa? ¡Qué defensa! Aquello era como llamar a la UGT para que negociara con Hitler. 24-24.
En la reanudación, el segundo cuarto, Eloy Doce ya tenía puesto a Edwards. No se rían, de verdad. Pero si aquello ya era jugar para tirar, imagínense como fue con el americano. ¡Eh!, fue el mejor en aquel rato. Metió 9 puntos, ayudado por Sebas y Taylor, otros que tiran como el "diablo".
La Palma metió tanto, ya se sabe que el baloncesto es cuestión de porcentajes, que el Hospitalet no aguantó el tirón. Ni la ayuda de Arco ni de Terrell ni de nadie. Lo ajeno huía del agua para meterse en una piscina y el "UB" se fue al descanso ganando de 12 puntos de diferencia. Antaño, en un recuerdo cercano, era un diferencia sustancial, pero los nuestros no tienen "dos tiempos", uno de control y otro para matar. ¡Qué va!, ayer sólo tenían una marcha. Quinta y todos para el aro ajeno.
En el tercer cuarto, en aquel período, La Palma mantuvo el acierto durante diez minutos, con un triple de ocho metros, sí de 8, de Taylor y otra de tres de Barcenas. Ellos, lo ajeno, a su ritmito. "Ya fallarán", pensaban. Claro, todos pintamos un árbol y nunca dibujamos las raíces. Es como si no existieran. Y sí, lógico, cuando el punto de mira se rueda tienes que vivir, en baloncesto no existe otra premisa, de la defensa. El "UB" no trabajó atrás. Bueno, Albert sí. El "5" dio "castañas" a todo rival, pero estaba sólo. Dígale a Sebas, Edwards o Taylor que defiendan. Se mueren de la "risa". Son buenos, muy buenos y con mucha magia, pero tienen su estilo, su forma de hacer baloncesto. Hasta Mena, que entró para jugar mal, estuvo descentrado ante Puyada. Pues eso, para qué más vueltas, ellos remontaron y lograron empatar a 71.
El último período ya fue una lotería. Eloy Doce apostó mucho tiempo por Sestokas y dejó en el banquillo a Edwards. El resto, por el estilo. Casi 8 minutos de igualdad. Algunos puntos de Taylor, otros de Barcenas, la ayuda de Albert... ellos aguantaron. Terrell, con "pie y medio", se iba a los 27 puntos. Era duro. Hospitalet tomó un "fisco", una milésima de ventaja. Los minutos se iban y una falta con posterior técnica sobre Albert ya dejó a la grada con la boca seca. Te da rabia. Es de aquellos partidos que quieres ganar, porque sí, porque te da gusto, pero no. El último minuto fue hacer faltas personales para tratar de recortar las distancias, pero ellos aguantaron y ganaron. Es así, es el sufrir del "UB", una idiosincracia que va en la camiseta. Y que nos gusta.
101-106
UB LA PALMA - HOSPITALET
Albert (16) - Jhonson (8)
Taylor (23) - Puyada (12)
Barcenas (9) - Arco (13)
Arrocha (17) - Tornas (9)
Sestokas (8) - Lambropuolus (15)
Mena (5) - Stewart (8)
Wachsmann (1) - Boccia (10)
Liñan (5) - Forcada (-)
Edwards (17) - Terrell (27)
Marolt (2)
Torres (2)
Árbitros: Raúl Sánchez y Rodríguez de Rada. No puede haber dos árbitros peores en toda la LEB. Seguro. Exluyeron por cinco faltas a Sestokas.
Parciales: 14-9, 24-24, 36-34, 54-43, -descanso-, 64-52, 71-70, 80-81 y 101-106.
Incidencias: Encuentro disputado en el pabellón insular de Miraflores ante la presencia de unos 1.000 espectadores.
V. MARTÍN, La Palma
La Palma metió 101 puntos y perdió. Y es verdad. Prometido. Es como tener un Audi A8 y vivir de alquiler en un apartamento sin agua. Sí, claro, vaya espectáculo, es cierto, pero ganó Hospitalet. Dámelos peores, partidos más rancios, que gane el "UB" y luego presumimos.
El encuentro comenzó con canastas. Aquí, allí, arriba y abajo. De donde quiera y pueda imaginar. Piense un sitio. ¿Ya lo tiene?, pues de ese lugar también. Era un ida y vuelta, correr, tirar y no defender. En los nuestros metían Taylor, Barcenas y el "pobre" de Albert cuando "barría" lo que sobraba. Enfrente, Lampropoulos se adueñó del poste bajo en los dos primeros cuartos, aquellos mismos que Terrell (jugó cojo) aprovechó para meter hasta de tres. ¿Y la defensa? ¡Qué defensa! Aquello era como llamar a la UGT para que negociara con Hitler. 24-24.
En la reanudación, el segundo cuarto, Eloy Doce ya tenía puesto a Edwards. No se rían, de verdad. Pero si aquello ya era jugar para tirar, imagínense como fue con el americano. ¡Eh!, fue el mejor en aquel rato. Metió 9 puntos, ayudado por Sebas y Taylor, otros que tiran como el "diablo".
La Palma metió tanto, ya se sabe que el baloncesto es cuestión de porcentajes, que el Hospitalet no aguantó el tirón. Ni la ayuda de Arco ni de Terrell ni de nadie. Lo ajeno huía del agua para meterse en una piscina y el "UB" se fue al descanso ganando de 12 puntos de diferencia. Antaño, en un recuerdo cercano, era un diferencia sustancial, pero los nuestros no tienen "dos tiempos", uno de control y otro para matar. ¡Qué va!, ayer sólo tenían una marcha. Quinta y todos para el aro ajeno.
En el tercer cuarto, en aquel período, La Palma mantuvo el acierto durante diez minutos, con un triple de ocho metros, sí de 8, de Taylor y otra de tres de Barcenas. Ellos, lo ajeno, a su ritmito. "Ya fallarán", pensaban. Claro, todos pintamos un árbol y nunca dibujamos las raíces. Es como si no existieran. Y sí, lógico, cuando el punto de mira se rueda tienes que vivir, en baloncesto no existe otra premisa, de la defensa. El "UB" no trabajó atrás. Bueno, Albert sí. El "5" dio "castañas" a todo rival, pero estaba sólo. Dígale a Sebas, Edwards o Taylor que defiendan. Se mueren de la "risa". Son buenos, muy buenos y con mucha magia, pero tienen su estilo, su forma de hacer baloncesto. Hasta Mena, que entró para jugar mal, estuvo descentrado ante Puyada. Pues eso, para qué más vueltas, ellos remontaron y lograron empatar a 71.
El último período ya fue una lotería. Eloy Doce apostó mucho tiempo por Sestokas y dejó en el banquillo a Edwards. El resto, por el estilo. Casi 8 minutos de igualdad. Algunos puntos de Taylor, otros de Barcenas, la ayuda de Albert... ellos aguantaron. Terrell, con "pie y medio", se iba a los 27 puntos. Era duro. Hospitalet tomó un "fisco", una milésima de ventaja. Los minutos se iban y una falta con posterior técnica sobre Albert ya dejó a la grada con la boca seca. Te da rabia. Es de aquellos partidos que quieres ganar, porque sí, porque te da gusto, pero no. El último minuto fue hacer faltas personales para tratar de recortar las distancias, pero ellos aguantaron y ganaron. Es así, es el sufrir del "UB", una idiosincracia que va en la camiseta. Y que nos gusta.
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