NOTICIAS LEÓN: Baloncesto León tira de corazón y defensa para 'pasearse' en el fortín de Miraflores.
Un parcial de 0-19 en el tercer cuarto lleva al conjunto leonés a la victoria en la pista de La Palma (59-77). Humphrey y Bernabé lideraron a los de Javi de Grado.
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No se puede acusar de falta de compromiso o de que no lo dan todo sobre la cancha a ninguno de los jugadores que aún quedan en la plantilla de Baloncesto León. Y es que no 'pintaba' nada bien el compromiso en La Palma, ante un equipo que llevaba un estratosférico balance de 8 victorias y una derrota en su feudo, con el juego interior debilitado tras la confirmación de la marcha de Rick Hughes y con Rocchia a medio gas por los problemas en su hombro.
Sin embargo, el equipo leonés tiró de corazón y defensa para cuajar una actuación sensacional y no sólo vencer, sino aplastar a un La Palma que vio cómo los de Javi de Grado le pasaban por encima.
Gran defensa
De 18 (59-77) acabó venciendo un Baloncesto León que, tras una primera parte muy igualada, rompió el partido con un parcial de 0-19 en el tercer cuarto y aguantó esa diferencia hasta el final, llegando incluso a tener una máxima renta de 24 puntos en el último cuarto que sólo se vio reducida por el 'maquillaje' de La Palma en los minutos finales cuando la victoria ya estaba en el bolsillo de los leoneses.
¿Las claves? En primer lugar la defensa, sensacional sobre todo en la segunda parte; y en el segundo las de dos hombres que sobresalieron en una plantilla en la que no obstante todos las piezas rindieron a gran nivel. Uno el capitán Juanjo Bernabé, que dirigió con maestría al equipo y anotó con facilidad en ese parcial que sirvió a los de Javi de Grado para poner tierra de por medio; y otro el norteamericano Ryan Humphrey, que dio una lección de carácter y compromiso al dominar las zonas y erigirse en la piedra ángular de los leoneses a pesar de que se encontraba indispuesto e incluso en un momento del segundo cuarto tuvo que dirigirse en pleno juego hacia el banquillo leonés para vomitar, pero que aun así acabó con 21 puntos y 10 rebotes.
Momento crítico
Sin duda ése fue el momento más crítico de los leoneses, que se habían ido tres puntos arriba al final del primer cuarto (12-15) y dominaban por cinco en el segundo (21-26) pero que de repende se encontraban con que Iturbe cometía su tercera falta y Humphrey se tenía que ir tras ese gran 'susto' en forma de vomitona en el banquillo. Sin embargo, apenas dos minutos después volvía directo de los vestuarios a la silla de cambios y León conseguía que el marcador continuara siéndole favorable con la llegada del descanso.
Fue entonces cuando, tras anotar la primera canasta en juego de la segunda parte, La Palma estuvo siete largos minutos sin anotar permitiéndo ese 0-19 que acabaría siendo definitivo para un León donde nadie falló, con Urtasun y Schraeder sumando 10 y 12 puntos respectivamente; Iturbe, sensacional como siempre en defensa y tirando del carro en ataque en el primer cuarto hasta acabar finalmente con 13 puntos; Fontet cerrando el rebote; y Jorge Calvo manteniendo el nivel del equipo en los minutos de descanso de Bernabé.
No se puede acusar de falta de compromiso o de que no lo dan todo sobre la cancha a ninguno de los jugadores que aún quedan en la plantilla de Baloncesto León. Y es que no 'pintaba' nada bien el compromiso en La Palma, ante un equipo que llevaba un estratosférico balance de 8 victorias y una derrota en su feudo, con el juego interior debilitado tras la confirmación de la marcha de Rick Hughes y con Rocchia a medio gas por los problemas en su hombro.
Sin embargo, el equipo leonés tiró de corazón y defensa para cuajar una actuación sensacional y no sólo vencer, sino aplastar a un La Palma que vio cómo los de Javi de Grado le pasaban por encima.
Gran defensa
De 18 (59-77) acabó venciendo un Baloncesto León que, tras una primera parte muy igualada, rompió el partido con un parcial de 0-19 en el tercer cuarto y aguantó esa diferencia hasta el final, llegando incluso a tener una máxima renta de 24 puntos en el último cuarto que sólo se vio reducida por el 'maquillaje' de La Palma en los minutos finales cuando la victoria ya estaba en el bolsillo de los leoneses.
¿Las claves? En primer lugar la defensa, sensacional sobre todo en la segunda parte; y en el segundo las de dos hombres que sobresalieron en una plantilla en la que no obstante todos las piezas rindieron a gran nivel. Uno el capitán Juanjo Bernabé, que dirigió con maestría al equipo y anotó con facilidad en ese parcial que sirvió a los de Javi de Grado para poner tierra de por medio; y otro el norteamericano Ryan Humphrey, que dio una lección de carácter y compromiso al dominar las zonas y erigirse en la piedra ángular de los leoneses a pesar de que se encontraba indispuesto e incluso en un momento del segundo cuarto tuvo que dirigirse en pleno juego hacia el banquillo leonés para vomitar, pero que aun así acabó con 21 puntos y 10 rebotes.
Momento crítico
Sin duda ése fue el momento más crítico de los leoneses, que se habían ido tres puntos arriba al final del primer cuarto (12-15) y dominaban por cinco en el segundo (21-26) pero que de repende se encontraban con que Iturbe cometía su tercera falta y Humphrey se tenía que ir tras ese gran 'susto' en forma de vomitona en el banquillo. Sin embargo, apenas dos minutos después volvía directo de los vestuarios a la silla de cambios y León conseguía que el marcador continuara siéndole favorable con la llegada del descanso.
Fue entonces cuando, tras anotar la primera canasta en juego de la segunda parte, La Palma estuvo siete largos minutos sin anotar permitiéndo ese 0-19 que acabaría siendo definitivo para un León donde nadie falló, con Urtasun y Schraeder sumando 10 y 12 puntos respectivamente; Iturbe, sensacional como siempre en defensa y tirando del carro en ataque en el primer cuarto hasta acabar finalmente con 13 puntos; Fontet cerrando el rebote; y Jorge Calvo manteniendo el nivel del equipo en los minutos de descanso de Bernabé.
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