DIARIO PALENTINO: Palencia Baloncesto volvió a perder en los instantes finales.
Palencia pinchó en el tercer cuarto, como casi siempre, y lo pagó con la derrota. Y es que hasta ese momento los palentinos tenían ventaja en el marcador, pero su rival aprovechó los peores momentos del cuadro visitante para ponerse por delante. Pese a todo, Palencia reacciono en los últimos diez minutos, y pudo igualar el encuentro en la última posesión, sin embargo, Bustamante falló su lanzamiento y Arteaga, que cogió el rebote, tampoco acertó a anotar.
ÁREA 11
Primer cuarto muy abierto que se jugó a una velocidad de vértigo. Locales y visitantes protagonizaron un mal comienzo desde el perímetro y es que las rápidas transiciones defensa-ataque propiciaban precipitación y mala selección de tiro, y, consecuentemente, malos porcentajes, principalmente en la línea de 6,75. Los palentinos se mantenían gracias a los siete puntos que Carles Bravo anotaba en este cuarto.
Las cosas cambiaron en el segundo. Palencia comenzó a acertar en sus lanzamientos triples (convirtió cinco en este periodo) y eso le bastó para abrir brecha en el marcador, con tres casi consecutivos de Carles Bravo que con 16 puntos se convertía muy pronto en el máximo anotador del partido. Así, Palencia consiguió once puntos de ventaja, pero tras un tiempo muerto solicitado por Rafa Sanz, técnico local, el UB La Palma consiguió, con dos acciones de Palacios, dejar la diferencia en siete puntos al descanso (25-32).
Tras la reanudación, los locales salieron a por todas ante un Palencia que bajó el nivel. Así, de inicio los locales anotaron tres triples consecutivos (34-32) que le ponían por delante en el electrónico. No reaccionó Palencia y el parcial se convirtió en un 15-4. El tradicional mal tercer cuarto de Palencia volvía a aparecer también en Miraflores, donde los palentinos se mostraron débiles en defensa y fallones en ataque, mientras que los locales, de la mano de Sebas Arroyo, iban incrementando la diferencia a su favor. Pese a todo, un arreón final de los palentinos puso el marcador en 47-42 al final del cuarto.
El último fue el cuarto mejor jugado por ambos. Palencia se recompuso, intensificó su defensa y mejoró en ataque, igualando fuerzas en la pista, donde el dominio fue alterno, con parciales a favor de uno y respuestas rápidas por parte del contrario. A falta de 24 segundos, ya con el 64-62, Palencia no aprovechó la posesión del balón, fallando sus tiros Bustamante y Arteaga tras coger el rebote.
Primer cuarto muy abierto que se jugó a una velocidad de vértigo. Locales y visitantes protagonizaron un mal comienzo desde el perímetro y es que las rápidas transiciones defensa-ataque propiciaban precipitación y mala selección de tiro, y, consecuentemente, malos porcentajes, principalmente en la línea de 6,75. Los palentinos se mantenían gracias a los siete puntos que Carles Bravo anotaba en este cuarto.
Las cosas cambiaron en el segundo. Palencia comenzó a acertar en sus lanzamientos triples (convirtió cinco en este periodo) y eso le bastó para abrir brecha en el marcador, con tres casi consecutivos de Carles Bravo que con 16 puntos se convertía muy pronto en el máximo anotador del partido. Así, Palencia consiguió once puntos de ventaja, pero tras un tiempo muerto solicitado por Rafa Sanz, técnico local, el UB La Palma consiguió, con dos acciones de Palacios, dejar la diferencia en siete puntos al descanso (25-32).
Tras la reanudación, los locales salieron a por todas ante un Palencia que bajó el nivel. Así, de inicio los locales anotaron tres triples consecutivos (34-32) que le ponían por delante en el electrónico. No reaccionó Palencia y el parcial se convirtió en un 15-4. El tradicional mal tercer cuarto de Palencia volvía a aparecer también en Miraflores, donde los palentinos se mostraron débiles en defensa y fallones en ataque, mientras que los locales, de la mano de Sebas Arroyo, iban incrementando la diferencia a su favor. Pese a todo, un arreón final de los palentinos puso el marcador en 47-42 al final del cuarto.
El último fue el cuarto mejor jugado por ambos. Palencia se recompuso, intensificó su defensa y mejoró en ataque, igualando fuerzas en la pista, donde el dominio fue alterno, con parciales a favor de uno y respuestas rápidas por parte del contrario. A falta de 24 segundos, ya con el 64-62, Palencia no aprovechó la posesión del balón, fallando sus tiros Bustamante y Arteaga tras coger el rebote.
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