EL DIA: La Palma perdió el rumbo y ante el Burgos sufrió otra triste derrota.

El "UB" ya no pelea hasta el final, se queda sin oxígeno en el tercer cuarto, y ayer dio la sensación de no confiar en sus propias posibilidades. Es cierto que el rival contó con un gran Diego García y el acierto de Lo Grippo, pero lo más preocupante es que los isleños no tienen poder de reacción y están desorientados.



VÍCTOR MARTÍN, La Palma

La Palma se "muere". No es perder. No es llevar seis derrotas seguidas. No es eso. Es verles las caras. Sentir lo que piensan. Darse cuenta de que no se creen capaces de casi nada. Se ven inferiores. Están "rotos"... Algo habrá que cambiar. Y cambiarlo ya.

El Burgos llegó "tocado". Con 8 para jugar y Lo Grippo, que acabó siendo el mejor, sólo para ayudar. Eso de "vender" que no es un rival de la misma "liga" que La Palma es para sentir vergüenza ajena. Una estupidez. Entonces, ¿quién es de la liga del "UB"? ¿Sólo Rosalía y Gandía? Hay que ser serios, que mamá también lee esto y no le puedo mentir. Ella, a sus años, ya no está para "chorradas".

El arranque fue igualado. Casi siempre lo es. El "UB" suele jugar dos cuartos, los primeros, de forma correcta. Sin presión, no siente miedo. Te mete un triple Sala, trabaja bien Koffi, "tapa" Suka... eso. Lo fácil. Ellos, incluso, fueron por detrás (22-20) y el "UB", si no lo conoces, te da la sensación de poder ganar. De verdad. Lo ves "moverse", pelear, trabajar... te pone los "cuernos" y ni te enteras. Eso, hasta que le coges el truco. Sí, llegas al descanso casi empatado (40-42) y piensas que perderás. Lo piensan hasta los jugadores. Ese es el fallo. Ni ellos creen que aguantarán.

El Burgos tampoco mostró nada del otro "jueves". Vamos, ni del "miércoles". Ahora quizás otros digan que ganó porque es un equipazo. Mire, le diré la verdad. Prometido. Aguantó sencillamente por Lo Grippo, que entró para echar una mano y metió 11 puntos en nueve minutos, y por el gran juego de García, que aprovechó que Suka se metió en faltas para hacer un "traje" al resto de marcadores. Ellos dos y algunas ayuditas del resto. Y punto.

Llegó el tercer cuarto. Decides taparte un ojo con la mano derecha, que aguantas por el codo con la palma de la izquierda. ¿Y eso?, pues nada. Una tontería para ver si algo cambia. Mete Terrell. ¡Bien! Sinanovic y Lorant suman en el rival. El partido se pone 47-46. ¿Será posible? ¡Que va! Parcial de 0-11. Corrales desde el tiro libre, Lo Grippo hasta de tres, otros dos puntos de Sanmartín (quizás se escriba junto)... El partido se partió. Burgos tomó la ventaja que necesitaba, aunque alguna acción de Kohlmaier y otra de Terrel pusieron un 53-59 ciertamente ilusionante.

En el último cuarto lo entiendes todo. Un "UB" normal, de los de siempre, de aquellos equipos de Roberto Estrello, por poner un ejemplo, levantaba este partido. Bueno, lo ganaba o, al menos, se partía el alma. Era Primera Autonómica, es verdad, pero es igual. Ahora no. La Palma se dejó ir. No es que se dejen ganar, no lo entiendan mal, es sencillamente que no están. Es como eso del sexo tántrico. Aguantas o se te revienta la "olla" (¿ahora se llama así?).

Pues eso, que la gente se fue pronto del pabellón, Terrell metió puntos en el tiempo de la "basura" y, después de muchísimo tiempo, se oyeron silbidos en la grada...

UB La Palma: Sala (3), Kohlmaier (16), Terrell (21), Ermolinski (2), Arrocha (11), -inicial-, Canals (4), Koffi (14), Suka (6) y Jonzén (-).

Autocid Burgos: Lorant (8), García (22), Sanmartín (10), Sinanovic (6), Corrales (2), -inicial-, Gruber (6), Lo Grippo (18), Gómez (7), Mena (4).

Árbitros: Sánchez Ardid y Feixa Ibáñez. Excluyeron con cinco faltas a Suka y Gómez.

Parciales: 10-13, 22-20, 32-30, 40-42, -descanso-, 44-46, 53-59, 60-69 y 77-83.

Incidencias: Encuentro disputado en el pabellón insular de Miraflores ante unos 400 espectadores. La peor entrada de la temporada.