DA: Ninguno se ve favorito.
Carlos Frade y Alejandro Martínez, entrenadores de UBLa Palma e Isla de Tenerife Canarias, ceden la iniciativa a su oponente en el partido del viernes.
J. A. Felipe / Santa Cruz de Tenerife
Como suele ser habitual en partidos de rivalidad regional, la posibilidad de que uno de los dos contendientes se pueda considerar portador del cartel de favorito es complicada.
Ayer, Carlos Frade, entrenador de la UB La Palma, y Alejandro Martínez, técnico del Isla de Tenerife Canarias, llevaron a cabo sus ruedas de prensa previas al duelo del viernes y aprovecharon para considerar favorito a su oponente por uno u otro motivo.
En el caso del preparador de la UB, señaló que ellos tienen asumido el rol de "equipo pequeño" y más cuando "te enfrentas a este tipo de equipos y de partidos. Está claro que el factor sorpresa está más de tu lado. El grande quiere que toda vaya según el guión, pero en eso ya nos conocen. Lo bueno es que hemos competido bien con ellos dos veces este verano".
Por su parte, Martínez indicó que los palmeros son favoritos "un un tanto por ciento un poquito mayor" ya que "juegan en casa, y tienen la plantilla al completo", pero reconoció que una vez el balón esté en el aire, "te olvidas de los problemas que puedas tener y es sólo cinco contra cinco y tienes que intentar ser competitivo al máximo" indicó.
Piropos al rival
Tanto Martínez como Frade, además de buena relación, tienen una muy buena opinión de su contrincante.
Para Martínez, La Palma es un equipo que ya demostró que "trabajó mucho para ganar en Alcázar cuando llegaron a perder por 40-21" y que además, "tiene jugadores muy desequilibrantes. Tanto Palacios como Sebas pueden decidir un encuentro y también hay que destacar el descaro de los jóvenes que tienen mucha hambre y que están aprendiendo muy rápido".
Frade no le fue a la zaga para considerar a los aurinegros "un equipazo" que, por si fuera poco, llegan con un Richi Guillén en estado dulce: "Vienen de ganar con un súper partido de Guillén que está teniendo mucho peso en el ataque, quizás más del que quisiera Alejandro, pero está jugando a un nivelazo. Otro factor importante será controlar a su perímetro porque Sábat, Gansey, y veremos si juega alguno de los lesionados, ayudan a que se juegue a su ritmo y es muy complicado de parar. Esperemos poder romper ese ritmo para que no se puedan sentir cómodos en el partido".
Partido especial
El propio Frade recordó, como también suele ser habitual, que el partido de mañana no es más especial para él que el de Navarra o Alcázar el pasado sábado, aunque comprende todo lo que rodea al choque: "Entiendo el entorno de los clubes y el de las Islas, pero para mí es muy imporatnte como lo fue el primero o el segundo que hemos jugado. No estamos para regalar partidos, así que los jugadores saben el tipo de encuentro que tenemos delante. Conocen bien al rival y saben que necesitaremos estar al 100% para poder ganar y que eso aún no nos garantiza nada".
En el otro lado, Alejandro Martínez admitió que, a pesar de las lesiones y la primera derrota en León, los nervios nunca hicieron mella en su equipo: "Quizás han estado fuera del equipo. Somos conscientes de lo que nos pasa y que aunque empezamos en agosto estamos inmersos en la pretemporada por no poder contar con dos jugadores tan imporantes para nuestra rotación" concluyó.
Como suele ser habitual en partidos de rivalidad regional, la posibilidad de que uno de los dos contendientes se pueda considerar portador del cartel de favorito es complicada.
Ayer, Carlos Frade, entrenador de la UB La Palma, y Alejandro Martínez, técnico del Isla de Tenerife Canarias, llevaron a cabo sus ruedas de prensa previas al duelo del viernes y aprovecharon para considerar favorito a su oponente por uno u otro motivo.
En el caso del preparador de la UB, señaló que ellos tienen asumido el rol de "equipo pequeño" y más cuando "te enfrentas a este tipo de equipos y de partidos. Está claro que el factor sorpresa está más de tu lado. El grande quiere que toda vaya según el guión, pero en eso ya nos conocen. Lo bueno es que hemos competido bien con ellos dos veces este verano".
Por su parte, Martínez indicó que los palmeros son favoritos "un un tanto por ciento un poquito mayor" ya que "juegan en casa, y tienen la plantilla al completo", pero reconoció que una vez el balón esté en el aire, "te olvidas de los problemas que puedas tener y es sólo cinco contra cinco y tienes que intentar ser competitivo al máximo" indicó.
Piropos al rival
Tanto Martínez como Frade, además de buena relación, tienen una muy buena opinión de su contrincante.
Para Martínez, La Palma es un equipo que ya demostró que "trabajó mucho para ganar en Alcázar cuando llegaron a perder por 40-21" y que además, "tiene jugadores muy desequilibrantes. Tanto Palacios como Sebas pueden decidir un encuentro y también hay que destacar el descaro de los jóvenes que tienen mucha hambre y que están aprendiendo muy rápido".
Frade no le fue a la zaga para considerar a los aurinegros "un equipazo" que, por si fuera poco, llegan con un Richi Guillén en estado dulce: "Vienen de ganar con un súper partido de Guillén que está teniendo mucho peso en el ataque, quizás más del que quisiera Alejandro, pero está jugando a un nivelazo. Otro factor importante será controlar a su perímetro porque Sábat, Gansey, y veremos si juega alguno de los lesionados, ayudan a que se juegue a su ritmo y es muy complicado de parar. Esperemos poder romper ese ritmo para que no se puedan sentir cómodos en el partido".
Partido especial
El propio Frade recordó, como también suele ser habitual, que el partido de mañana no es más especial para él que el de Navarra o Alcázar el pasado sábado, aunque comprende todo lo que rodea al choque: "Entiendo el entorno de los clubes y el de las Islas, pero para mí es muy imporatnte como lo fue el primero o el segundo que hemos jugado. No estamos para regalar partidos, así que los jugadores saben el tipo de encuentro que tenemos delante. Conocen bien al rival y saben que necesitaremos estar al 100% para poder ganar y que eso aún no nos garantiza nada".
En el otro lado, Alejandro Martínez admitió que, a pesar de las lesiones y la primera derrota en León, los nervios nunca hicieron mella en su equipo: "Quizás han estado fuera del equipo. Somos conscientes de lo que nos pasa y que aunque empezamos en agosto estamos inmersos en la pretemporada por no poder contar con dos jugadores tan imporantes para nuestra rotación" concluyó.
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