DA: Nunca se rinde.
Acan / Santa Cruz de La Palma
La Palma nunca se rinde. El orgullo y la garra mueve a los de Rafa Sanz, por eso, cuando se caen, vuelven a levantarse. La UB se impuso anoche al Ourense, con el que iguala a 12 victorias en la tabla clasificatoria.
La Palma empezó el partido muy mal. Un parcial de 5-14 ponía en ventaja a los gallegos, transcurridos cinco minutos. A partir de ahí, la rotación del equipo local, con la entrada de Mena, que anotó dos triples, dio nuevos bríos a La Palma, que se puso en ventaja (21-20). Los de Paco García se vieron sorprendidos por la reacción de los hombres de Rafa Sanz.
El segundo cuarto ofreció un partido mucho más físico. El Ourense se puso a presionar en toda la pista, en tanto que los canarios se mostraron muy acertados desde la línea de tres. El partido estaba por entonces lleno de alternativas y emoción.
En los instantes previos al descanso, cuando parecía que La Palma se iría al vestuario con ventaja, una protesta de Sebas Arrocha, a falta de un segundo y con su equipo ganando de un punto, hizo que el Ourense pudiese dar la vuelta al marcador. Salva Arcos se encargó de hacer el 40-41.
Tras el intermedio, el UB La Palma recibió un 0-5 de parcial, lo que obligó a Rafa Sanz a pedir muy pronto su primer tiempo muerto. Las órdenes del técnico cordobés dieron resultado, toda vez que los de la Isla Bonita mejoraron muchísimo en defensa y empezar a cimentar su victoria.
La mejora defensiva también propiciaba un mayor acierto en ataque, ganando en confianza los locales con ello. La Unión Baloncesto La Palma pudo dar la vuelta al marcador, en parte gracias a un inspirado Josemi García, el mejor del partido.
Con ventaja en el electrónico, los visitantes intentaron jugaron un poco más rápido, lo que provocó una mayor pérdida de balones. Paco García no acababa de encontrar un quintento de garantías, que pudiese superar la buena defensa de los anfitriones.
El 59-57 con el que se llegó al final del tercer cuarto decía bien a las claras que el UB La Palma vivía su mejor momento del partido. Siguió el buen juego de los locales, sobre todo en defensa y sobre todo en el apartado reboteador. El contragolpe empezó a funcionar. Los locales supieron jugar como equipo, moviendo la bola con rapidez.
Con una buena renta en el marcador, La Palma empezó a luchar por el average. Y lo lograron (80-72), superando por un punto dicho average que se antoja vital en este apretado final liguero.
La Palma nunca se rinde. El orgullo y la garra mueve a los de Rafa Sanz, por eso, cuando se caen, vuelven a levantarse. La UB se impuso anoche al Ourense, con el que iguala a 12 victorias en la tabla clasificatoria.
La Palma empezó el partido muy mal. Un parcial de 5-14 ponía en ventaja a los gallegos, transcurridos cinco minutos. A partir de ahí, la rotación del equipo local, con la entrada de Mena, que anotó dos triples, dio nuevos bríos a La Palma, que se puso en ventaja (21-20). Los de Paco García se vieron sorprendidos por la reacción de los hombres de Rafa Sanz.
El segundo cuarto ofreció un partido mucho más físico. El Ourense se puso a presionar en toda la pista, en tanto que los canarios se mostraron muy acertados desde la línea de tres. El partido estaba por entonces lleno de alternativas y emoción.
En los instantes previos al descanso, cuando parecía que La Palma se iría al vestuario con ventaja, una protesta de Sebas Arrocha, a falta de un segundo y con su equipo ganando de un punto, hizo que el Ourense pudiese dar la vuelta al marcador. Salva Arcos se encargó de hacer el 40-41.
Tras el intermedio, el UB La Palma recibió un 0-5 de parcial, lo que obligó a Rafa Sanz a pedir muy pronto su primer tiempo muerto. Las órdenes del técnico cordobés dieron resultado, toda vez que los de la Isla Bonita mejoraron muchísimo en defensa y empezar a cimentar su victoria.
La mejora defensiva también propiciaba un mayor acierto en ataque, ganando en confianza los locales con ello. La Unión Baloncesto La Palma pudo dar la vuelta al marcador, en parte gracias a un inspirado Josemi García, el mejor del partido.
Con ventaja en el electrónico, los visitantes intentaron jugaron un poco más rápido, lo que provocó una mayor pérdida de balones. Paco García no acababa de encontrar un quintento de garantías, que pudiese superar la buena defensa de los anfitriones.
El 59-57 con el que se llegó al final del tercer cuarto decía bien a las claras que el UB La Palma vivía su mejor momento del partido. Siguió el buen juego de los locales, sobre todo en defensa y sobre todo en el apartado reboteador. El contragolpe empezó a funcionar. Los locales supieron jugar como equipo, moviendo la bola con rapidez.
Con una buena renta en el marcador, La Palma empezó a luchar por el average. Y lo lograron (80-72), superando por un punto dicho average que se antoja vital en este apretado final liguero.
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