EL DIA: El Gran Canaria ganó en el último minuto a un buen UB La Palma.
V. MARTÍN, S/C de La Palma
Los encuentros de pretemporada te engañan. Entre rotaciones de jugadores, la alteración tanto de sistemas como de movimientos para interpretar lo trabajado durante la semana y, además, el cansancio de los jugadores por el esfuerzo físico acumulado, las valoraciones globales quedan adulteradas. La Palma, para entendernos, no tiene ni tampoco necesita el nivel de Gran Canaria, aunque ayer, si recordamos lo más cercano, el encuentro llegó casi hasta el final con las fuerzas igualadas.
Teniendo como base todo lo anterior, sí hay una cosa evidente. Eso sí es definitivo. El "UB" es un equipo que nace desde atrás. Duro en la pintura, ajustado en la defensa... exigente en el esfuerzo. En el compromiso no falla. Arriba, quizás sea porque es el aspecto menos trabajado por los tiempos de pretemporada, o tal vez porque necesite de mayor calidad ofensiva, se notó más "atascado". Con dudas. Sin movimientos establecidos. O, también, que no es lo mismo atacar al Vic, por ejemplo, que meterle el hombro a un Gran Canaria con más músculo. Con más peso. Eso, que el rival juega y era bueno.
Con todos estos condicionantes, todas valorables pero ninguno "aplastante" para el futuro y a los que se une la baja de Mena que deja al "UB" con un solo base , La Palma hizo un buen partido. Es cierto que Gran Canaria siempre llevó la iniciativa, pese a las rotaciones de jugadores como Moran o Norris, tirando del oxígeno de banquillo y apoyados en el acierto de Carrol o MacDonald, pero es igual de verdad que el "UB" nunca se "rompió" y pudo incluso ganar al final. Palacios fue su hombre fuerte en el interior, en ataque pidió y tiró, aunque Padgett también asumió protagonismo en la pintura, en un dúo ciertamente interesante. Se les ve con confianza.
Aquel 34-44 del descanso hizo temer en un tercer cuarto definitivo, pero no lo fue. Eso sí, tampoco el Gran Canaria explotó todo lo que tiene para romper e irse, mantuvo sus rotaciones incluso cuando el "sol" más apretaba. ¿Y La Palma?, pues mejor. Los minutos de Olmos, la aportación más en juego que en puntos de Bonhome, tener un "3" alto con recursos como Gruber... Saben, que el partido estaba 69-71 a poco más de un minuto, lo que te ofrece, aún sabiendo que es un amistoso, sensación de grandeza.
Pues eso, que al final ganó el equipo de ACB y, lo más positivo, que La Palma no fue la misma a la que Tenerife le "lavó" la cara. Ya va teniendo el orgullo y la garra de Rafa Sanz. Se le va pareciendo.
UB La Palma: Padgett (14), Gruber (8), Ibarra (3), Palacios (15), García (15), -inicial-, Bonhome (2), Olmos (4), Orfila (-) y Arrocha (8).
Gran Canaria: Savané (9), Norris (19), Moran (3), Carroll (14), MacDonald (17), -inicial-, Fisher (7), Augustine (5), Konate (-), Bellas (3), Kickert (-) y Sanders (7).
Árbitros: García Leal, Pérez Niz y José Araña. Muy bien, sin complicaciones.
Parciales: 7-13, 14-22, 23-29, 34-44, -descanso-, 45-53, 54-59, 56-64 y 69-75.
Incidencias: Encuentro en favor de los damnificados por el incendio que asoló Fuencaliente y Mazo ante la presencia de unas 400 aficionados.
Los encuentros de pretemporada te engañan. Entre rotaciones de jugadores, la alteración tanto de sistemas como de movimientos para interpretar lo trabajado durante la semana y, además, el cansancio de los jugadores por el esfuerzo físico acumulado, las valoraciones globales quedan adulteradas. La Palma, para entendernos, no tiene ni tampoco necesita el nivel de Gran Canaria, aunque ayer, si recordamos lo más cercano, el encuentro llegó casi hasta el final con las fuerzas igualadas.
Teniendo como base todo lo anterior, sí hay una cosa evidente. Eso sí es definitivo. El "UB" es un equipo que nace desde atrás. Duro en la pintura, ajustado en la defensa... exigente en el esfuerzo. En el compromiso no falla. Arriba, quizás sea porque es el aspecto menos trabajado por los tiempos de pretemporada, o tal vez porque necesite de mayor calidad ofensiva, se notó más "atascado". Con dudas. Sin movimientos establecidos. O, también, que no es lo mismo atacar al Vic, por ejemplo, que meterle el hombro a un Gran Canaria con más músculo. Con más peso. Eso, que el rival juega y era bueno.
Con todos estos condicionantes, todas valorables pero ninguno "aplastante" para el futuro y a los que se une la baja de Mena que deja al "UB" con un solo base , La Palma hizo un buen partido. Es cierto que Gran Canaria siempre llevó la iniciativa, pese a las rotaciones de jugadores como Moran o Norris, tirando del oxígeno de banquillo y apoyados en el acierto de Carrol o MacDonald, pero es igual de verdad que el "UB" nunca se "rompió" y pudo incluso ganar al final. Palacios fue su hombre fuerte en el interior, en ataque pidió y tiró, aunque Padgett también asumió protagonismo en la pintura, en un dúo ciertamente interesante. Se les ve con confianza.
Aquel 34-44 del descanso hizo temer en un tercer cuarto definitivo, pero no lo fue. Eso sí, tampoco el Gran Canaria explotó todo lo que tiene para romper e irse, mantuvo sus rotaciones incluso cuando el "sol" más apretaba. ¿Y La Palma?, pues mejor. Los minutos de Olmos, la aportación más en juego que en puntos de Bonhome, tener un "3" alto con recursos como Gruber... Saben, que el partido estaba 69-71 a poco más de un minuto, lo que te ofrece, aún sabiendo que es un amistoso, sensación de grandeza.
Pues eso, que al final ganó el equipo de ACB y, lo más positivo, que La Palma no fue la misma a la que Tenerife le "lavó" la cara. Ya va teniendo el orgullo y la garra de Rafa Sanz. Se le va pareciendo.
UB La Palma: Padgett (14), Gruber (8), Ibarra (3), Palacios (15), García (15), -inicial-, Bonhome (2), Olmos (4), Orfila (-) y Arrocha (8).
Gran Canaria: Savané (9), Norris (19), Moran (3), Carroll (14), MacDonald (17), -inicial-, Fisher (7), Augustine (5), Konate (-), Bellas (3), Kickert (-) y Sanders (7).
Árbitros: García Leal, Pérez Niz y José Araña. Muy bien, sin complicaciones.
Parciales: 7-13, 14-22, 23-29, 34-44, -descanso-, 45-53, 54-59, 56-64 y 69-75.
Incidencias: Encuentro en favor de los damnificados por el incendio que asoló Fuencaliente y Mazo ante la presencia de unas 400 aficionados.
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